El sol brilla furioso en lo alto, siempre me facinó poder ir hacia él, ser como un Icaro moderno y llegar, verlo de cerca, tocarlo, volar alrededor y jugar con sus rayos. Pienso la forma de hacer un artefacto que me lleve hasta sus dominios.
Con mucho trabajo y esfuerzo tengo lista mi maquina voladora para el viaje, ato a tierra firme un cordel al sueño de gloria, de llegar alto bien alto, mas alto que lo imaginable, casi hasta rozarle la nariz y me dejo llevar por la brisa hacia el cielo limpido, inmenso.
Conforme me elevo el cordel se tensa, se estira, se estira, se estira, más, más y más, en la ultima tracción se corta.
El calor abrasador y la sirena de los bomberos me despiertan, la casa esta en llamas, una brasa traviesa de mi pipa, prende fuego mi barrilete..
Tinta Roja
Mayo 2010